07/12/2015

una vida marcada por las mentiras parte 3

-“Quiero que me digas ya y no te estés con tonterías ni rodeos, quiero que lo digas ya”

La madre desvío un segundo la mirada inquisidora de su hija ya no aguanto que le mirara de esa manera y se lo dijo tal como ella lo pidió, sin rodeos, sus palabras fueron:

-“No te lo quise decir…, no sabia como… pero dado que me has escuchado… pues el medico tras la intervención antes de hablar contigo nos llamo y explico lo que sucedía…, y es que no tienes útero, no lo tienes y es a consecuencia de una malformación genética y tus ovarios, no son los de una mujer, son los de una niña, eso quiere decir que…

Ella le interrumpió con una voz fría diciendo:

-“Jamás podré tener hijos propios, jamás sentire una vida dentro de mi… ¿eso es lo que me ibas a decir? O mejor dicho lo que jamás me ibas a decir, ¿Cómo se te ocurre ocultarme información de tal calibre? Yo soy la que padezco esto ¿Cómo no tuviste el coraje de decírmelo? ¿Quién mas lo sabe?, te exijo que me lo digas ¿Quién demonios sabe esto?”

La rabia y el odio se habían apoderado de ella ya no controlaba la ira ni el volumen de su voz, se había convertido en gritos de odio y cólera.

La madre mi se movía no podía al ver su hija así, el miedo la paralizo y luego tras unos minutos viendo como la que era su hija se había convertido en una fiera indomable trago duramente y procuro calmarla intentando abrazarla, la cual al ver que su madre se acercaba ella la paro en seco y le dijo con vos mas calmada pero con odio en su tono:

-“¿Me lo vas a decir o no?”

-“todos lo saben todos lo que estuvimos aquel día contigo en el hospital lo saben”

Ella dio dos pasos atrás y dijo:

-“Esta si que no te la perdonare jamás en tu vida, que sepas que jamás y que te quede bien claro que jamás te lo voy a perdonar (repetía), que todos lo sepan menos yo, que me miraban y pensarían “pobrecita la niña dañada la que jamás será madre” eso si que no te lo perdonare jamás”

Se dio media vuelta y se fue a su habitación y se encerró. Durante mucho tiempo la comunicación fue escasa y casi no se veían a pesar de vivir bajo el mismo techo.

Con el tiempo las cosas se fueron restableciendo solas, como dice el dicho “El tiempo lo cura todo”… nunca estuvo mas equivocado.

 

Ella se convirtió en una mujer alta y de muy buen porte, por donde pasaba se hacia notar con su presencia aunque no mediara palabra con nadie y hasta caminando por la calle la gente la miraba porque algo en ella así lo producía, su caminar firme y elegante, la altivez en su persona llamaba la atención de quien se cruzara en su camino. Su carácter fuerte y tajante sus ideas fijas y convicciones sólidas, es un enigma para quien casi no la conoce.

Pero las personas que si la conocen o que ella así lo quiso y dejo, saben bien que si vida no fue fácil y que las mentiras la han marcado toda su vida.

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elrincondeika

comexan

 

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